Dentro de los cambios más grandes que se ha sufrido pero a la vez ganado como secuelas del COVID -19 es que del año 2020 al 2021 muchas personas a nivel mundial se han concientizado sobre la importancia de una buena alimentación para llevar una vida más sana. Ésta ha sido una gran oportunidad para comenzar hábitos más saludables a través de una alimentación balanceada y así poder mejorar nuestra salud en general y tener un sistema inmune fuerte y por tanto mejorar la calidad de vida.
Para lograr una alimentación balanceada y un sistema inmune es crucial consumir los 5 grupos de alimentos que son verduras, frutas, proteínas, carbohidratos y grasas y por supuesto siempre tomar agua natural. En este artículo me centraré en el consumo de verduras a diario.
Las verduras ayudan a prevenir enfermedades y a mejorar la salud física aportando vitaminas y minerales para un correcto desarrollo de tejidos, también ayudan mantener una tracto gastrointestinal funcional y el metabolismo acelerado.
A pesar que muchos sabemos estos beneficios y que las verduras son importante de consumir, en ocasiones se nos acaban las ideas de cómo agregarlos a nuestra dieta cotidiana.
Te comparto ideas para poder incorporar vegetales en tu dieta diaria y ejemplos que puedes usar para comer en una dieta diaria balanceada.
Acompañar los huevos con vegetales (omelette de espinaca)
Palitos de verduras con limón y sal (pepino con limón y sal)
Soufflé de verduras (soufflé de acelga con queso cottage)
Jugos de vegetales (Jugo de apio o zanahoria)
Licuados de frutas y verduras (licuados de proteína con arándanos y kale)
Ensaladas de temporada (ensalada capresse o griega)
Sopas calientes ( sopa de güicoy)
Verduras rellenas (berenjena rellena de carne molida)
En sándwiches (pan pita integral relleno de hummus con chile pimiento, zucchini y cebolla asada)
Aprovecha la gran variedad de verduras que tenemos en Guatemala y sobre todo varía los colores para que sean más apetitosos los platillos. Te recuerdo que la accesibilidad a los alimentos afecta mucho más de lo que pensamos a la forma en que los consumimos, para ello, déjalos a la vista en el refrigerador o alacena de la casa. Al verlos constantemente es mucho más fácil que los comamos y de ese modo también evitamos que se echen a perder porque “olvidamos que los teníamos” o simplemente por desidia.
Comienza una vida más sana y mejora la calidad de tu alimentación aprovechando todos los beneficios del consumo de verduras.