Como bien sabes, el fin de año es una época asociada a los convivios, vida social y búsqueda de momentos felices con amigos y familiares, lo cual involucra variedad de galletas, chocolates, comidas, bebida, etc. y por lo mismo, ¿Eres de los que piensa que es imposible comer saludable en esta época?
Además en esta época del año surgen viajes, regalos y gastos extras, por lo que algunos deciden suspender el pago de la cuota del gimnasio pensando que es un gasto innecesario, porque no asistirán todo el mes de diciembre y debido a los convivios y la alimentación de la temporada creen que no tendrán progreso físico. En cambio otros, deciden pagar la cuota, pero dejan de asistir porque destinan el tiempo del gimnasio a la vida social, lo que provoca dormir tarde y no logran levantarse, o si su horario de gimnasio es en la tarde/noche, prefieren dar prioridad a la reunión con los amigos, y tampoco asisten por falta de tiempo.
Otra conducta muy propia de la época es el pensamiento consolador: ¡siendo enero el primer mes del nuevo año me haré el detox, regresaré con buen ánimo al gimnasio, incluiré un programa de alimentación saludable y seguro que voy a portarme bien y tendré mucha fuerza de voluntad para vivir saludable!
Es decir, que el mes de diciembre es un mes que pone a prueba tu disciplina de practicar con regularidad ejercicio físico o tu entrenamiento deportivo, cumplir con tu programa de alimentación saludable, pues hay diversidad de actividades propias de fin de año, por lo que debes ser valiente y salir adelante combinando vida social, ejercicio y buena alimentación.
Es importante que tengas en cuenta que en la edad adulta, la mayoría de personas ganan entre 1-3 libras por año y esas libras no las vuelven a bajar, al contrario, las van acumulando, es por eso que quiero compartirte y hacerte consciencia para que no pienses que el tener vida social no te permite sobrellevar un estilo de vida saludable.
Cuando hablamos de vida saludable quiero expresar que es la combinación de comer saludable, hacer actividad física regular, descanso, trabajo y tener vida social combinados.
En diciembre se nos plantea como si esto fuera imposible, pero en realidad, ES POSIBLE, teniendo como primera herramienta la alimentación consciente. La alimentación consciente es tomarnos el tiempo de observar nuestros hábitos respecto a la comida y el porqué estamos comiendo de esta u otra manera (por vergüenza a decir que no, porque es comida que no comemos siempre, porque ya nos aburrimos de las dietas, porque es lo más fácil, porque eso nos dan, etc.).
La alimentación consciente debe complementarse con una adecuada preparación de los alimentos ya sea, a la plancha, cocida, horneada, y variando todos los grupos de alimentos en cantidades que nos dejen satisfechos pero no empanzados.
El segundo complemento a la alimentación consiente es el ejercicio, esta es la mejor manera de balancear la comida saludable con las comidas altas en calorías que se nos presentan en las fiestas y salidas con amigos y familia.
Evita poner de excusa que no puedes ir al gimnasio, busca una rutina en internet para hacer en casa y adecúa el tiempo según tus necesidades, prepara comidas especiales y diferentes de las usuales para celebrar y recuerda que la preparación es muy importante.
¡DISFRUTA DE LA VIDA SOCIAL Y EL TRABAJO QUE SON PARTE DE UN ESTILO DE VIDA SALUDABLE Y ES POR ESO NECESARIO COMBINARLO CON UNA ALIMENTACIÓN CONSCIENTE, DESCANSO Y EJERCICIO!