Todos por lo general, sabemos que el azúcar es un ingrediente natural que ha formado parte de la alimentación de los seres humanos durante miles de años, sin embargo, en las últimas décadas debido a las múltiples enfermedades causadas por el exceso en el consumo de azúcares y los procesos químicos utilizados para el refinamiento del azúcar, se ha recomendado su consumo moderado. Ahora bien, el control en el consumo moderado no resulta ser fácil, pues este ingrediente se encuentra en todos los alimentos que forman parte del grupo de los carbohidratos, el cual es utilizado por el cuerpo para transformarlo en su principal fuente de energía, (ATP), siendo la glucosa el azúcar más importante para el cuerpo.
Muchos de los alimentos que consumimos hoy en día contienen azúcar, unos más que otros, generando un consumo excesivo de azúcar por parte de los alimentos procesados y otra enorme cantidad de azúcar consumida proviene de azúcar añadida a los alimentos.
Por lo motivos anteriores, quiero comenzar explicando que existen varios tipos de azúcar, en su forma más simple los identificamos de la siguiente manera:
- Fructosa: tipo de azúcar que se encuentra principalmente en las frutas, vegetales, miel.
- Glucosa: el tipo de azúcar más común y se le conoce como dextrosa.
- Sacarosa: más conocida como azúcar de mesa, se extrae de la caña de azúcar o de la remolacha y está presente en la mayoría de frutas y verduras de forma natural.
- Maltosa: proviene de las bebidas de malta y cereza.
- Galactosa: azúcar que proviene de los lácteos.
La importancia de conocer los tipos de azúcares es detectar qué productos contienen azúcar refinada y la cantidad de azúcar que aporta el producto por porción. Es importante aprender a saber combinar alimentos que contiene glucosa con otros grupos de alimentos con proteínas y grasas vegetales, para poder disminuir los niveles de glucosa en sangre y evitar picos de glucosa (azúcar).
Cuando mis pacientes acuden a consulta en la clínica, con frecuencia me solicitan si pueden eliminar el azúcar de sus bebidas o comidas y si pueden sustituirla por miel. Esto en principio no es malo, porque es cierto que hay un tipo de azúcar refinado y unos tipos de azúcares no refinados, sin embargo, para evitar los picos de insulina, lo más correcto es aprender a eliminar el azúcar agregado en todas sus formas de las comidas y bebidas.
Por otra parte, es cierto que la glucosa es necesaria para todos los procesos metabólicos del cuerpo, pero la podemos encontrar en una mejor forma en alimentos como granos básicos, leguminosas, frutas y verduras.
Además, para administrar mejor el azúcar en los alimentos, te quiero invitar a aprender a combinar alimentos que contiene glucosa con alimentos con proteína y grasas vegetales. Con estos ejemplos centraré en explicar cómo saber administrar la alimentación con azúcar y así evitar picos de insulina:
- Fructosa y fibra: banano con 1 cucharada de mantequilla de maní natural.
- Glucosa y proteína: camote asado y fajitas de pollo.
- Sacarosa y grasa: ensalada de remolacha cocida con aros de cebolla y aguacate, vinagreta.
- Maltosa y grasa: bebida de malta y semillas de almendra.
- Lactosa y grasa: trocitos de queso de cabra + aceitunas.
Hoy te invito a que aprendas a comer saludablemente, de esta forma, puedas prevenir enfermedades por consumir excesos de azúcar, tales como evitar la Diabetes Mellitus, poder controlar la resistencia a la insulina, evitar el Hashimoto y enfermedades intestinales, entre otras.
